lunes, 12 de diciembre de 2022

EL LAZARILLO DEL DUERO: Historia de Zamora en cantares de Joaquín del Barco (1898)

 


Francisco Trancón Pérez

El 31 de mayo de 2018, en la feria del libro celebrada en Zamora, el Instituto de Estudios Zamoranos “Florián de Ocampo” con motivo de celebrarse el 120 aniversario de la publicación del Lazarillo del Duero, expuso esta obra como merecido homenaje a su autor

 Joaquín del Barco fue erudito, escritor, ameno tertuliano y de profesión comerciante de tejidos. Falleció el 10/09/1910.

Tiene dos obras publicadas: “La gaita zamorana” y la “Historia de Zamora en cantares”, sobre esta última trataremos en este trabajo. También debió escribir una zarzuela “La plaza de las verduras”, desconozco si ha sido editada.

El libro es una auto edición gestionada por el propio autor, fórmula generalizada durante aquella época en la que el propio profesorado o inspectores de enseñanza, en la gran mayoría, editaban sus propios libros de texto, al margen de la creciente influencia de editoriales como la de Hernando (1828) que fue la primera en publicar manuales escolares a escala comercial, extendiendo su ámbito a todo el territorio nacional. Joaquín del Barco es una afortunada excepción, aunque no perteneció a la docencia, escribió este volumen con gran acierto.

Un medio informativo describe el tratado como una pequeña muestra de la literatura local del cambio de siglo en ocasiones adornada con tintes históricos, dando como resultado un gracioso divertimento (Zamora 24 horas.com. 31/05/2018).

Se puede considerar este libro editado en Zamora por la imprenta de Enrique Calamita, como manual escolar, señalando la categoría e importancia del mismo por D. Urcisino Álvarez Martínez como prologuista.

El informe emitido por la Junta de Instrucción Pública de Zamora (16/03/1898), con relación a esta obra, considera relevante la transmisión de valores educativos de gran utilidad para que los niños puedan conocer los hechos históricos más notables de la provincia, de las estimabilísimas personas que, nacidas en ella, se han distinguido en los diversos temas del saber, en las artes y en las guerras, a fin de que, estimulados por tan dignos modelos, se desarrolle en todos los amores a la patria.

El libro consta de tres partes: arciprestazgos de Zamora, partidos judiciales e historia, aunque en algunas ocasiones el contenido no se somete estrictamente al título, mezclando conceptos diferentes.

El manual utiliza una modalidad expresiva en forma de cuartetos, sin rima, versos libres, no sometidos a la métrica poética clásica, evocando el estilo utilizado por los antiguos trovadores y de forma más próxima, por los cantares de los ciegos, cuya representación más universal se refleja en el Lazarillo de Tormes de nuestra literatura.

Las estrofas se agrupan en 136 cuartetos- con la singularidad anteriormente indicada- narrando los hechos de forma global, lo descrito se condensa en la mayoría de las situaciones en un mismo cuarteto, aunque sin nexo iterativo entre ellos completan en forma de piezas el argumento de la obra. Joaquín del Barco muestra gran habilidad en la descripción a través de poemas propios, activando de forma plástica imágenes de unos acontecimientos de la historia de Zamora, que sin duda hoy recordamos con admiración.

Sería interesante conservar algún testimonio de la metodología utilizada en aula, centrada principalmente en la participación del alumnado. La imaginación nos puede ayudar en esta aventura. El docente- previa lectura de un texto- aprovecharía la oportunidad para explicar el contenido y mostrarse como modelo lector a imitar por los escolares, favoreciendo el aprendizaje de los versos (no sólo de memoria, sino también, intentaría facilitar su comprensión)   

Se ofrecen-de forma testimonial- algunos fragmentos de la obra:

La pizarra, de Losacio;/de Sanabria, las maderas;/la piedra, de Sobradillo/y el barro, de Pereruela.

Rodeado de arboleda/y de escabrosas montañas, / existe un hermoso lago/en la Puebla de Sanabria.

Diego de Ordás, Benavides, /Mercadillo y Mazariegos, /siguieron a Hernán Cortés/a la conquista de Méjico.

 El capítulo más desarrollado es el dedicado a la historia de Zamora, expuesta de forma cronológica (desde los celtas hasta la revolución francesa), con algunos fragmentos que no siguen el ritmo temporal de los hechos.

 El análisis del texto escrito referido a la legibilidad (tamaño de la letra, espacio entre caracteres y palabras, longitud de línea e interlineado) es correcto. La relación entre el número de palabras diferentes portadoras de sentido (llenas) y palabras (útiles)- que sirven para unir vocablos- es apropiada para la lectura de los escolares, facilitando su comprensión, aunque hay que considerar la heterogeneidad y singularidad de los nombres de los personajes que aparecen en el texto, circunstancia que no impide el encanto y atractivo de la exposición. 

Es muy escasa la publicación de manuales escolares escritos por autores zamoranos, la conservación de este libro constituye un hallazgo de indudable valor. Tal vez no se utilizó fuera del ámbito territorial de la provincia. Según mis investigaciones no figura esta obra en ninguna de las bibliografías especializadas, me refiero concretamente a la Biblioteca MANES (UNED). Posiblemente en su día, no se enviaron ejemplares a la Biblioteca Nacional, en cuyo caso no pueden ser consultados, al no estar integrados en sus catálogos.

Textos escolares educativos referidos a la descripción de la geografía o historia en verso, en el ámbito nacional, apenas existen, comento alguno de los que he investigado.

Francisco del Valle (1859, León) autor de   Geografía descriptiva compuesta en verso sencillo y fácil para uso de los niños, manifiesta que su intención es hacer menos enojoso el estudio de una multitud de términos de difícil pronunciación en nuestro idioma con el aliciente del verso. A pesar de sus buenos propósitos, la obra resulta compleja.

  Ramiro Mestre (Madrid, 1885) en su tratado Lecciones de geografía de España dialogadas en verso, no particulariza ninguna región, aportando datos muy generalizados.

Casimiro Jausoro (Bilbao, 1884) publicó Compendio de geografía en verso, el último capítulo dedicado a aspectos descriptivos, lo efectúa de forma muy esquemática, la referencia que hace sobre el río Duero es muy breve y no menciona su vinculación con Zamora.

 Consideraciones

 
Se observa- con la prudente cautela sujeta a otros trabajos de investigación - el carácter inédito de este libro, sin referencias comparativas con otros de su género, con la particularidad de centrarse en un tema histórico de la región de Zamora, adaptado al mundo infantil, avalado por las autoridades educativas y eclesiásticas de aquella época.

A lo anteriormente expresado, subrayo que la forma y contenido de la obra, por su originalidad, síntesis expositiva, rigor histórico, amenidad, el autor ha conseguido que la validez de su libro sirva con el objetivo propuesto: servir como manual de texto escolar.


La última parte del informe de la Junta de Instrucción Pública, referido anteriormente, cobra un significado muy relevante contribuye poderosamente a que con poco trabajo se apodere la niñez de las enseñanzas que se deprenden de los hechos heroicos en él escritos y de los conceptos en el mismo consignados.











martes, 1 de junio de 2021

APUNTES DE GIMNÁSTICA, manual escolar (Zamora, 1897)

 


Francisco Trancón Pérez

La E. Física en España se integró de forma poco definida en los planes de estudio de la enseñanza secundaria en los institutos a partir de 1896.

El profesorado encargado de impartir esta materia procedía de la Escuela Central de Gimnástica, que a pesar de haber acordado su creación por Ley de 9/3/1883 bajo el impulso de Germán Gamazo, ministro de Fomento, profesor que fue de la Institución Libre de Enseñanza (ILE), no se llevó a cabo el proyecto, por la salida a los pocos meses del gobierno liberal. Hubieron de pasar cuatro años (1887), con el retorno de los mismos, para que se impartieran los cursos en la especialidad de Gimnasia.

En 1892, tuvo que concluir sus enseñanzas, debido a que el Gobierno conservador   no realizó el presupuesto para su continuidad. Los titulados fueron destinados a centros de educación secundaria de las capitales.  

 

Profesorado de Gimnasia en el instituto de secundaria de Zamora (1896-1899)

El Instituto de segunda enseñanza de Zamora inicia su andadura en 1846. (Véase, “Discurso inaugural de la solemne apertura del Instituto Provincial de 2ª Enseñanza de la ciudad de Zamora.  Memoria leída por D. Bartolomé Morán Pinto”. (7/10/1846).

La cátedra de Gimnasia se crea a partir del año 1897, siendo Ildefonso Ramos Pérez, profesor interino de Gimnasia, quien toma posesión de la asignatura el día 14/7/1897. Había desempeñado este cargo el curso anterior (1896-1897), por tanto, se puede considerar como el primer docente que imparte esta nueva materia en el instituto, aunque aparece referenciada en el cuadro del profesorado y asignaturas de los mismos, sólo nominalmente, sin asignación horaria, alumnado, libro de texto, etc.

En el curso 1897/1898, figura la asignatura de Gimnasia vacante, con un horario   semanal de lunes a sábado incluido, de 11 a 12,30 (por la mañana) y de 4 a 5,30 en la sesión de tarde. En el apartado correspondiente a la distribución de asignaturas, profesorado, etc. que servía de   información al alumnado matriculado en el centro, figura como libro de texto “Prácticas”.

En el curso 1897/1898 es nombrado catedrático interino para la asignatura de Gimnasia, con fecha 3/11/1897 Ángel Domínguez Guerra, que sustituye a Ildefonso Pérez Ramos. Toma de posesión de su cargo el 13/11/1897.

En la R.O de 27 de agosto de 1898, aparece la   convocatoria de las plazas de profesor de Gimnástica de varios institutos provinciales de segunda enseñanza, entre ellos el de Zamora.  Se podía acceder mediante concurso. Los aspirantes tenían que estar en posesión del título de profesor oficial de Gimnástica, acreditando méritos y servicios, para que pudieran ser valorados.

 En el curso 1889/1899, es propuesto como catedrático numerario de Gimnasia, Jaime García Alsina, con fecha 9/5/1899, que no toma posesión de su cargo.

Ángel Domínguez- que supuestamente no había obtenido plaza con carácter definitivo- continúa como responsable de la citada asignatura en calidad de catedrático interino.

 

Apuntes de Gimnástica: características de este manual

Estos apuntes fueron escritos por Ángel Domínguez Guerra, profesor de Gimnasia en el instituto de Zamora, como Apuntes de Gimnástica, (entendemos que desarrollando el libro de texto que figura en el cuadro de información al alumnado-como se indicó anteriormente- con el nombre de “Prácticas”)

 A finales del siglo XIX, es frecuente encontrar en las escuelas de primaria y secundaria, libros de texto redactados por los propios profesores de los centros. Existían pocas editoriales (la más significativas radicaban en Madrid y Cataluña)

La impresión de este manual se realizó en el establecimiento tipográfico de Enrique Calamita, Teatro Principal, Zamora, 1897. Consta de 53 páginas de tamaño cuarto menor

Su obra no se adapta al modelo de libro de texto, es un trabajo muy personal, auto editado, alejado por tanto de los circuitos editoriales de aquella época. No existe ninguna reseña bibliográfica que cite su existencia. Su uso iba dirigido al alumnado en general para su consulta como programa de la E. Física y como complemento teórico de la asignatura.

El contenido de este manual consta de 18 lecciones, distribuidas de la siguiente forma:

Fisiología humana (lecciones 1-5), Actividades gimnásticas (lecciones 6-10) y Ejercicios con aparatos (11-18). En la redacción de este libro se observan influencias de Lladó (1868) García Fraguas (1897), Ferrer Metayna (1893), Sánchez Serrano (1883), etc. autores destacados en temas de Educación Física de aquella época que posiblemente había consultado.

La parte correspondiente a Fisiología del cuerpo humano (que nombra como anatomía topográfica) es un estudio descriptivo, redactado con un lenguaje técnico, complejo, a veces de difícil comprensión.

En las actividades de gimnástica, el autor muestra un conocimiento amplio del tema, redactado con rigor expositivo, de forma sencilla, muy asequible al alumnado.

En el contenido de las lecciones de gimnasia considera algunos aspectos recomendados por la Dirección General de Instrucción Pública con relación a la Gimnasia higiénica (18/3/1894).

El esquema de la tabla o sesión de Educación Física, se dividía en las siguientes partes: ejercicios de orden, preparatorios, fundamentales y finales. Se iniciaban con una distribución y colocación de los alumnos en el lugar para realizar la lección (generalmente en el patio de recreo), seguían ejercicios muy sencillos de elevación de brazos, de piernas, flexiones, torsiones de tronco etc. Posteriormente una vez efectuado el calentamiento general del cuerpo, se entraba en la parte más intensa de la lección consistente en flexiones, extensiones, ejercicios abdominales, laterales, etc. La posición de los alumnos se mantenía guardando una distancia equilibrada entre ellos, normalmente en una distribución por filas. La parte final solía consistir en la realización de alguna carrera o juego.

Curiosamente este diseño metodológico de la lección de gimnasia, perduró hasta los años sesenta del siglo pasado, cuando se instauró la práctica de la gimnasia educativa, que rompió definitivamente con el sistema rígido y secuencial de la etapa anterior para dar protagonismo al movimiento natural y espontáneo del alumno, dotándole de belleza, armonía y estética.

Un apartado fundamental es la utilización de aparatos gimnásticos, cuya práctica solía realizarse de forma independiente, sustituyendo a la lección de gimnasia descrita anteriormente. Subraya Domínguez que la dificultad de adquirir ciertos aparatos costosos y la falta de nociones para usarlos, no debe de ser un obstáculo para la práctica de la gimnasia, se puede prescindir de ellos. No obstante, aconseja la construcción personal de estos utensilios de forma sencilla, indicando pautas y ejercicios que en ellos se pueden realizar.

Indica los siguientes: bastón, barra de hierro, mazas, poleas, paralelas, escalas de madera y de cuerda, planos inclinados, anillas, columpios, venablo y carrera volante. Me detengo en la reseña de este último aparato por su originalidad.

Hace esta descripción “se clava un poste verticalmente en el suelo de seis o siete metros de altura que tiene en su punta libre una rueda como la de un barquillero que puede girar libremente. Se ata a cada radio una cuerda que pende de la tabla para poderla coger sin esfuerzo. Los participantes se sujetan a cada extremo de la cuerda, corren dando vueltas alrededor del poste, tirando de la cuerda y este movimiento no tardará en elevarlos, poniendo solo de tiempo en tiempo los pies en la tierra”

Observaciones

Los Apuntes de Domínguez Guerra constituyen un caso aislado e inédito. Manifiesto la dificultad de encontrar publicaciones análogas efectuadas por otros colegas de los institutos de secundaria de Castilla y León de aquella época.

Su esfuerzo es meritorio, consigue que sus Apuntes figuren como libro de texto en el cuadro de materias a impartir en el instituto. De esta forma intenta hacerse un hueco dentro del cerrado claustro de catedráticos, reivindicando la importancia de la Gimnasia en el currículo de secundaria, participando de forma activa en la vida académica del centro al ser considerados profesores con voz y voto.

A esta obra le faltan ilustraciones de los distintos ejercicios gimnásticos y de los aparatos. Para informar al lector de estos aspectos, se adjuntan varios dibujos, recogidos de la obra de: LLADÓ, Joaquín. “Nociones de Gimnástica higiénica”. Librería de Juan Bastinos e Hijo, editores. Barcelona, 1868.

Indica el autor que el libro analizado continúa con una segunda parte dedicada a aparatos ortopédicos de gimnasia. Posiblemente lo escribiría, pero no he encontrado su publicación.

 










 

jueves, 1 de octubre de 2020

La obra pedagógica de Manuel Panero Martínez: docente zamorano (1867)

 

Francisco Trancón Pérez

 (Trabajo publicado en el dominical del 31/1/2021, de la OPINIÓN-EL CORREO de Zamora)

 Antes de analizar las publicaciones de carácter educativo de Manuel Panero, describo sumariamente  algunos aspectos relacionados con  el profesorado de aquella época.

El movimiento pedagógico de los docentes de la provincia de Zamora durante la segunda mitad del siglo XIX, al igual que en otros lugares (León y Vitoria) que he tenido la oportunidad de investigar, habría sido importante. Aunque carezco de datos relevantes que puedan avalar tal  afirmación, pienso que se repetirían algunos de estos indicadores: creación de asociaciones profesionales del magisterio provincial, publicación de revistas, asistencia del profesorado a cursos estivales de formación pedagógica, establecimiento de un montepío para garantizar la jubilación de los docentes, etc.

No pretendo –con estas reflexiones- encubrir las lamentables circunstancias  en la que se desarrollaba la vida de algunos  docentes sometidos a privaciones económicas, a ejercer la docencia en aulas deprimentes, a sufrir el abandono asistencial de ayuntamientos y diputaciones provinciales, sino indicar que a pesar de todas las carencias observadas, el magisterio de aquella época mostró su buen hacer con profesionalidad y  creó un movimiento comunitario de ayuda profesional y personal.

Manuel Panero  nació en Moraleja del Vino (Zamora) el 22 de diciembre de 1831.  Desarrolló una meritoria carrera  profesional en el ámbito de la educación en primera instancia como maestro de enseñanza primaria, ascendiendo posteriormente a ser regente (director) de la Escuela Normal de Maestros de Zamora. Fue inspector de primera enseñanza en Zamora, Lugo, La Coruña y Toledo, finalizando sus tareas docentes  como maestro de la Escuela Modelo Municipal de Madrid. Cargo al que accedió no  sin polémica, debido a la impugnación  que hizo de su plaza Calixto Pascual Barreda aspirante a la misma. Este destino implicaba un sueldo anual de 2.500 pesetas (superior al que cobraba como inspector de primera enseñanza)

Es autor de estas obras relacionadas con temas educativos:

  Programa  de Instrucción primaria elemental ampliada. (Imprenta Nicanor Fernández, Zamora ,1867 (343 páginas)

 Tablas de equivalencias métricas de las pesas y medidas de Zamora reducidas a las métrico-decimales. Imprenta de  Nicanor Fernández. Zamora, (1868)  (147 páginas).

 El corazón de la infancia (máximas morales en la escuela). Obra premiada en la exposición Regional de León (1876)

 Guía de Maestros (no he logrado referencias sobre esta obra). Existe un libro publicado con el mismo título por Pedro González Arias (Asturias, 1865). El contenido es una relación completa del profesorado de primera enseñanza (maestras y maestros), figurando la plaza de destino de cada uno ellos y el sueldo anual. Importante documento, si siguiera esas pautas el escrito por Manuel Panero.

 

 

De entre la bibliografía del autor voy a  centrarme en el Programa de Instrucción Primaria elemental ampliada

 

Este libro se encuadra dentro de los manuales escolares utilizados en el aula como “enciclopedia escolar”, atribución que no es arbitraria, sino que viene refrendada por estas características.

Inclusión de materias curriculares no compartimentadas como asignaturas independientes, sino globalizados en un solo libro.

Desarrollo didáctico centrado en el memorismo, dotando de unidad a cada lección, procurando que a cada una de ellas no les falte nada esencial.

 El autor identifica su libro  como “programa”, no como “enciclopedia”, ya que en esa época apenas estaba popularizada y no se contemplaba en la legislación escolar vigente.

 Justifica la utilización de este libro escolar, basándose en tres aspectos:

 a) Economía para los padres al adoptar un solo libro. El Reglamento General de Escuelas de Primeras Letras (1825) y la posterior Ley de 21 de junio de 1838, con relación a los libros que puede utilizar el alumnado, señalan como aconsejables-entre otros- estos : Catecismo de Fleuri; Religión de Pinton, Aritmética  de las Escuelas de San Ildefonso, Gramática y Ortografía de Herranz, Caligrafía de Torío de la Riva; Historia de España de Fulbe, etc. Son muchos libros y no están al alcance de todas las economías.

b) Claridad en los niños al utilizar un libro único con un lenguaje uniforme sencillo y adaptado.

c) Guía práctica para el profesorado, ya que desarrollan el contenido de los programas escolares, con orientaciones didácticas.

 Concluye en la presentación de este libro que ha sido experimentado durante catorce años con éxito en diversas escuelas.

 Análisis metodológico del manual escolar.

 El libro abarca las siguientes materias expuestas en este orden: Historia Sagrada; Religión; Gramática (ortografía y sintaxis); Aritmética; Geometría; Geografía y Agricultura.

Este listado curricular se adapta a las normas prescritas  por las disposiciones legislativas antes citadas en los años correspondientes a 1825 y 1838

 En cuanto a los contenidos, el autor sostiene que son más extensos que lo indicado por la  ley (aspecto contemplado en el título del manual).

 En este sentido hay que concretar que las escuelas  de un solo maestro se dividían en  elementales completas cuando se impartía Religión, Moral, Lectura, Escritura, Aritmética (cuatro reglas de contar con números abstractos), Gramática y Ortografía. En el caso de que no se pudieran impartir todas estas materias, la escuela se denominará incompleta.

La escuela primaria superior, además del currículo indicado en las  escuelas completas, amplía  los contenidos en aritmética, geometría, incluyen Dibujo lineal,  nociones de física e historia natural y elementos de geografía e historia de España.

En este tratado de Manuel Panero se observa que efectuó una adaptación bastante aproximada dirigida a escuelas primaria superiores.

Aunque en las disposiciones generales se incluye la práctica de la caligrafía y la  normas de urbanidad, no aparecen en este libro que estamos comentando.

En la metodología utilizada se observan estas características:

Cada materia viene precedida por  un dibujo alusivo a la asignatura, hecho a plumilla en blanco y negro (son las únicas ilustraciones)

La redacción se hace en estilo catequético: a) Pregunta (letra redonda); Respuesta (letra cursiva en negrita). A veces utiliza un preámbulo aclaratorio cuando el contenido es complejo.

Los escolares deben de aprender de memoria las respuestas.

Graduación de los contenidos en ocho secciones (grupos de alumnos) en las asignaturas de Gramática, Aritmética y geometría, en el resto no.

 En aritmética y geometría se efectúan ejercicios prácticos de problemas  concernientes a cada materia.

Sugiere al  profesorado que  proponga actividades de refuerzo o ampliación que estime conveniente para sus escolares

Prioridad de la ortografía sobre la sintaxis.

 Conclusiones.

 Este manual es un tratado simplificado de lo que posteriormente se convertiría en una enciclopedia. Constituyendo posiblemente el primer manual escolar de estas características editado en Zamora. Debió de ser una novedad este medio didáctico que popularizó el dicho de “he estudiado por el Panero”, como hicieran posteriores generaciones con la utilización de la enciclopedia Álvarez (obra de otro zamorano).

Aunque de edición modesta  el Programa  de Instrucción primaria elemental ampliada cumplió una función básica para la transmisión y ayuda a los escolares, dotándoles de un valioso instrumento pedagógico.

Existen ciertos paralelismos entre el Programa de Panero y el manual escolar escrito por Ricardo Díaz Rueda La Escuela de Instrucción Primaria (Valladolid, imprenta Cuesta, 1844)

Ambos son libros de ayuda escolar, aunque el de Díaz Rueda los contenidos son más amplios y elaborados, incluyendo retórica, poética, caligrafía y ortología. No son áreas específicas independientes, sino ampliación de la asignatura clásica de Lenguaje.

 

Situar al magisterio zamorano dentro de la vanguardia pedagógica de la escuela pública de enseñanza primaria  a partir de la segunda mitad del siglo XIX, es un hecho- aunque no verificado en profundidad- por falta de documentación.

 Cito algunos profesionales de la enseñanza de Zamora que desarrollaron temas significativos en el ámbito educativo:

 Agapito Hernández Marcos  regente de la Normal de Maestros de Zamora)  publicó una Aritmética para uso de los niños, subrayando que era especialmente aplicada a las niñas. Editada por la imprenta del Boletín Oficial de Zamora (1875)

Casto de la Rúa Ruiz (nació en Pozoantiguo, 1846) autor del libro El crisol de la educación infantil, declarada obra de texto para las escuelas (Real Orden de 9/11/1889)

Pedro Gazapo Cerezo (nació en Zamora, 1862).Fue director de la Escuela Normal Superior de Maestras.

Pablo Montesino Cáceres nació en Fuente el Carnero (1781-1849). Es  el primer director de la Escuela Normal de Maestros de España. Escribió Manual para las escuelas de párvulos.        

Claudio Moyano Samaniego (se sitúa su lugar de nacimiento en Fuente la Peña o Bóveda de Toro) (1809-1890). Fue ministro de Fomento, promulgó la Ley de Instrucción Pública (22 de julio de 1857), denominada Ley Moyano que ordenó el sistema educativo hasta 1970, cuando fue aprobada la Ley General de Educación.

Falta en esta  lista  dar a conocer y rescatar del olvido a maestras y maestros de Zamora y su provincia cuya obra merece ser divulgada.

 

Fotografías del manual escolar